Ir a Inicio

miércoles, 25 de febrero de 2009

COMO SABER SI LE GUSTO?

images



Consejos prácticos para salir de esa duda que quema el corazón.
¡Ajúa! El amor tocó a tu puerta y no te deja en paz, ¿verdad? Y ahora quieres saber si esa persona está que se muere por ti o por lo menos que le interesas. Ya, ya, ya, deja de tronarte los dedos porque si quieres saber la verdad acerca de eso lo único que puedes hacer son dos cosas:

1.- Ojo de águila. Observa bien a esa personita especial (ah, qué bonito suena ¿no?) y házte preguntas básicas como ¿se comporta igual contigo que con los demás? ¿te mantiene la mirada y te sonríe? ¿trata de algún modo de llamar tu atención? ¿parece que no quiere llamar tu atención pero te mira de reojo y te das cuenta? ¿se muestra cómodo cuando te acercas? ¿te has enterado que hable bien de ti? ¿te ignora por completo pero alguien te dijo que quiere saber de ti?

Si respondiste afirmativamente a algunas de estas preguntas, lo más seguro es que la víctima está lista para que ataques. Vamos, ¿qué haces aquí sentado leyendo esto? ¡Corre por tu víctima! Eso sí, con las debidas precauciones porque también puede significar que solo busca tu amistad y de nada servirá que llegues directo a invitarla a una cena romántica, a confesarle tu amor con chococalates y violines o, en el peor de los casos, a robarle un beso. Si no le gustas, te llevarás una decepción que te costará unos meses superar. Por eso pon en alerta esa antena y ojo de águila, siempre. O bien, puedes intentar la sagunda opción.

2.- El único ser humano que tiene la respuesta acerca de si le gustas o no, es ella, esa persona. Tienes que preguntarle o alguien tendrá que hacerlo por ti. Si dice que sí le gustas, lo tienes en bandeja de plata. Deja de leer y corre a ser feliz. Si dice que no, deja de leer y corre a llorar entre almohadas y música deprimente. Pero si no puedes ir porque te gana el miedo y nadie de tus amigos puede ir por ti porque le gana la risa (suele pasar), entonces recurre a métodos alternos como notas anónimas, mensajeros del reino animal o mensajeros bajo contrato (niños pequeños a los que convences con unas monedas). El peligro en este caso es que tal vez no responda y te quedes en las mismas... y no queremos eso ¿verdad?

Pues bien, entonces como te darás cuenta la única y verdadera manera de saber es yendo tú mismo. Pero no seas rudo, no llegues con la pregunta por delante como si fuera una manta de manifestación, no, mejor llega tranquilamente y ofrece lo mejor que tienes: tu corazoncito. Y no me refiero a que le digas ¡Mira, vengo a regalarte mi corazón! porque te apuesto 300 hectáreas de mi reino a que se partirá de risa.

Si no le has hablado anteriormente, ofrece tu amistad y con el paso del tiempo verifica algunas de las preguntas del punto uno, te será más fácil responderlas o brinca al siguiente paso: Si ya le hablas, te llevará menos tiempo; halágale alguna virtud y si se sonroja, sonríe o se pone nerviosa significa que vas bien. Házlo constantemente, halágale la vestimenta, la sonrisa, la inteligencia, pero sin ser demasiado festivo en ello o sonarás con falsedad. Si solamente te agradece y no da ningún signo de que esté disfrutando el halago entonces estás frito. Crucemos los dedos por que no sea así.

Ahora ve y haz lo que tengas que hacer porque frente a esta pantalla no está la realidad. La realidad está allá afuera y te está esperando, ya sea para ahogarte de felicidad o para otras cosas de las que luego platicaremos.

images

DECALOGO DE SEDUCCION.....

images



Existen mujeres capaces de iluminar una habitación con su sola presencia. Capaces de hacer bailar a los hombres al son del ritmo de sus caderas. Mujeres con un poder de atracción irresistible al género masculino. Y te preguntas, ¿cuál es su secreto?


Si tus intentos de conquista siempre han acabado en fracaso, no te pierdas nuestro decálogo de seducción. Prepárate porque caerá rendido a tus pies.


Decálogo de seducción

1. Desde el cerebro
Más que un cuerpo 10, para conquistar necesitas una mente seductora. La seducción es un arte que dependerá de tu capacidad de persuasión e incluso de manipulación para hacerle creer que tú eres la mujer de su vida. Si tu mente lo tiene claro, la seguridad se reflejará en tu cuerpo. Sólo has de mantener la cabeza fría, apuntar al objetivo y disparar.

2. Con seguridad
A los hombres les atraen las mujeres seguras de sí mismas, puesto que el reto de conquistar su corazón es mayor. Pero ten cuidado con transformar esa seguridad en agresividad, porque puedes asustarle. Canalízala a través de la sonrisa y el misterio.

4. Sé natural
Debes tener cuidado de no sobreactuar, se te verá falsa y conseguirás el efecto contrario al que buscas.

5. Sé femenina
Debes encontrar tu encanto. Escucha el lado femenino que llevas dentro y deja aparcada esa faceta de camionero para cuando salgas con amigas. Si te declaras abiertamente una condicional del fútbol y de la cerveza, tienes más posibilidades de convertirte en su amiga que en su pareja.

6. Crea un aura de misterio
Existen algunos truquitos para generar una aura de misterio a tu alrededor. Por ejemplo, escucha con interés todo lo que cuente, dándole todo tu apoyo, cariño y comprensión. Cuando haya caído en tus redes, simula una retirada. Aprovecha para hablar con otros hombres, así provocarás ciertos celos. Vuelve otra vez a mostrarle toda la atención del mundo. Estas variaciones de ritmo te harán impredecible, lo que provocará cierto misterio sobre tu persona… y ¿a quién no le atraen las cosas misteriosas?

7. Nada de hablar como una cotorra
Tampoco es cuestión de que no despegues los labios en toda la noche. La seducción es también saber qué decir y en qué momento hacerlo. Inicia conversaciones que le puedan interesar, muéstrate receptiva e interesada por sus comentarios. Pero, sobre todo, no hables de cosas profundas al principio, ni sueltes un monólogo sobre tu vida si no quieres aburrirle.

8. Busca su punto débil
Todos tenemos debilidades a las que no nos podemos resistir. Si encuentras cuál es la suya y la sabes explotar, se rendirá. Por ejemplo, si es una persona protectora acude al cine con él a ver una película romántica o de miedo, llora, agárrate a sus brazos, y potenciarás su lado masculino de protección al sexo ‘débil’. Que es un romántico empedernido, no dejes de sorprenderte con sus palabras o detalles, por muy desfasados que puedan llegar a ser.

10. Sentido del humor
A los hombres les encantan las mujeres con sentido del humor capaces, incluso, de reírse de sí mismas. El humor es uno de los mejores afrodisíacos en las relaciones. Pero un exceso te puede convertir en la chica graciosa del grupo. Para evitarlo, mézclalo con un poco de misterio e inocencia. Este cóctel te convertirá ante sus ojos en la mujer ideal.


Imprenta digital
Fax por internet
hosting barato
cable dvi
soporte tv
tarot en directo
horoscopo aries
seat segunda mano
volkswagen segunda mano
toner compatible

PARA QUE CAIGA RENDIDO A TUS PIES

images



Qué hace que un hombre caiga rendido a tus encantos y se enamore de ti? La respuesta no es tan simple, pero según los expertos, los hombres necesitan del compañerismo, sexo y una buena comida. Los hombres necesitan sí o sí estos tres atributos para que no se te escape.

Para que tu pareja te quiera cada día más es importante mantenerla feliz. Además de ser una buena compañera, debes saber escucharlo aunque te este hablando de cómo le fue en el partido de fútbol, debes mostrarte interesada en lo que te cuenta. Encárgate de mantener viva la chispa de la pasión.

Déjate seducir. Dejate invitar, seducir y regalar. Si te trae un peluche o unas flores no te rías de él, dejá que despliegue sus armas de conquista.

Vida propia. Conserva tus amigas y tus actividades. No hay nada que desenamore más que una chica desarreglada y que espera en un sofá a su novio. Vive tu propia vida y déjasela vivir a él.

Respeto. ¿Le gustan los coches?, ¿le fascina mirar fútbol los domingos? ¿los fines de semana solo vive para dormir hasta muy tarde? Pues aguántate y busca otra cosa que hacer. Así no invadirás su terreno y no terminará huyendo.

Escúchalo. El compañerismo es el pan de cada día en una relación. No desconfies de él. Acompañalo a donde él quiera, asi sea a un partido de fútbol.

Dale pasión. Mantén viva la chispa de la pasión. Invéntate situaciones sensuales que hagan que centre su atención en ti. Tambien puedes probar con una cena romántica.

No lo rechazes en la cama. ¿te duele la cabeza?, ¿estas en tus días? tomate una pastillita y sigue este consejo. Nunca lo rechaces a menos que sea por una causa mayor.

No mientas. No exíste nada peor que descubrir una mentira. Manejate siempre con la verdad.


No asfixies. Dejalo ser.Asi no te guste lo que el haga pon tu mejor sonrisa y si te da bronca, hablá con una amiga después que él se haya ido.

No lo tomes como confesor. Eso de que tu pareja es tu amigo, no lo es del todo cierto. Existen cosas que debes callar y por tu bien solo contárselas a tus amigas, como por ejemplo: si quieres hablar que estás indispuesta, de tu dieta o de la ropa que te no te entra.

No lo descalifiques, sobre todo delante de los demás. Lo que menos le gusta a un hombre es sentirse inútil o tonto. Si comete errores o dice cosas estúpidas, como suelen hacerlo, comentáselo con sutileza cuando esten a solas. Si no, te terminará odiándote.

Ahora ya sabes como mantener contento a tu pareja. Pon en práctica estos tips y verás lo bien que empezarás a llevarte con el amor de tu vida.

images

martes, 24 de febrero de 2009

INFIDELIDAD

“Tan adentro estas en mi, que mi mente no concibe, si eres tu
quien en mi vives o soy yo quien vivo en ti”….





Existen varias causas por las cuales se comete una infidelidad. Las razones pueden ser sentimentales, sexuales, o incluso motivada por una pasión como la ira o la venganza. Sean cuales fueran las razones, no llegan a justificar el engaño y el dolor causado a la otra persona que compone la relación. Veremos a continuación las diferencias entre la infidelidad masculina y la infidelidad femenina, los síntomas y finalmente el perdonar una infidelidad como la gran prueba del amor y la dedicación de una pareja.

Infidelidad Femenina
Las mujeres erosionadas por la rutina y el aburrimiento tratan, en la mayoría de los casos, de resucitar, con la infidelidad, la chispa del romance perdido. No se trata aquí de algo carnal, aunque también lo sea, sino mas bien de algo puramente sentimental y prohibido, algo que logre ponerla en contacto con la vitalidad de la seducción , algo que consiga hacerla volver a sentir esa droga natural enamoramiento fluyendo a través de su cuerpo. Este tipo de infidelidad, por ser de carácter sentimental, tiene un costado peligroso. A diferencia del sexual que una vez terminado el sexo termina también todo atractivo, en lo sentimental las cosas pueden pasar a otro plano y convertirse en una nueva relación.

DESCUBRIR LA INFIDELIDAD FEMENINA
Es muy difícil descubrir la infidelidad femenina por dos razones: una que las mujeres suelen mentir con una capacidad y una frialdad sorprendentes, y la segunda tiene que ver con el gran ego del hombre, el macho, que cree que es lo mejor para su mujer y que no hay nadie como él. Si se logra hacer a un costado estos dos obstáculos, los signos para descubrir una infidelidad femenina serian los siguientes:

-Una alegría inmotivada en medio de su rutina.

-Sarcasmo.

-Indiferencia ante el naufragio de la relación.

-Salidas con amigas más frecuentes que lo normal.

-Perdida del apetito sexual, incluso rechazo.

-Retrasos constantes en el trabajo.

-Esmero por lucir atractiva cuando sale.

PERDONAR UNA INFIDELIDAD
Perdonar una infidelidad es muy difícil para un hombre porque toca una fibra muy inherente a su personalidad: la masculinidad. Un hombre traicionado es un hombre disminuido, su imagen de macho se despedaza. Ante esto preferirá no ver mas a la persona amada a seguir viéndola para que le recuerde lo carnudo que fue. Sin embargo existe la posibilidad del perdón si la pareja es fuerte y se abre a un dialogo franco para sanear los aspectos desgastados de la pareja que causaron la infidelidad.

INFIDELIDAD MASCULINA
La infidelidad masculina tiene en gran parte de sus casos que ver estrictamente con el sexo. Criados durante años y generaciones en la cultura de los machos guardan en sus cabeza el mensaje social de que cuantas mas mujeres tiene mas hombres son. Esto lo ha llevado a un celo permanente que en muchas ocasiones los hace caer en la infidelidad. Este tipo de infidelidad sexual no es tan riesgo por parte del que la comete pues el interés acaba cuando la cuota de sexo se ve saciada.

¿COMO DETECTAR UNA INFIDELIDAD?
Los síntomas son mucho mas claros y mas visibles que en la infidelidad femenina. El hombre o tan cuidadoso para tejer la mentira muchas veces se ve enredado en sus propias palabras. Los síntomas son los siguientes:

-No poder explicar donde estuvo o con quien fue a un lugar.

-Llamadas misteriosas.

-Excesivo trabajo lo que le impide llegar a la hora habitual a la casa.

-Salidas con amigos muy frecuentes.

-Esmero en su forma del vestir.

-Una dosis de ternura mayor a la que la pareja esta acostumbrada.

-Perdida de interés sexual, inventando excusas para no tenerlo.

-Gastos de dinero injustificados.

¿COMO SUPERAR LA INFIDELIDAD?

La infidelidad del hombre, menos riesgosa para la otra parte de la relación, tiene una mayor aceptación social en el hecho ser perdonada. Generalmente el hombre descubierto en la infidelidad se muestra arrepentido hasta las lágrimas, y solo allí parece darse cuenta de lo que tiene. Sin embargo las probabilidades de que vuelva a cometerlas son altas. El diálogo es el arma fundamental para combatir la infidelidad y restaurar la relación.




Cuando se es infiel se rompe algo especial que para algunos no puede ser sustituido. Se destruye la confianza, produce inseguridad y hasta hay quienes se dejan manipular por su pareja, haciéndola sentir responsable por la traición. Actualmente, casi la mitad de las parejas están separadas. Esa es una realidad que se debe aceptar para intentar cambiarla.

Los especialistas recomiendan confesar el desliz sin entrar en detalles. No auspician el divorcio si la única causa es la infidelidad porque puede ser un error irreparable cuando existen otros factores rescatables en la relación. Aconsejan reflexionar sobre los valores que un día los llevaron a la unión y si estos siguen siendo válidos, preguntarse si vale la pena continuar con su pareja en lugar de perderlo todo por un error.

En toda relación de pareja llega un punto en que nos gana la rutina y el aburrimiento, y desearíamos recuperar la adrenalina y el romance de antaño.

Para que se produzca una infidelidad es necesario que se cumpla la “Regla de las C”: Curiosidad, Calentura y Confidencialidad.

El infiel engaña porque puede hacerlo, ya sea porque halló quien busque aventura, porque se dio la situación o/y porque cree que nadie lo sabrá. Si supiéramos que contamos con confidencialidad absoluta y garantía de que nadie se enterará jamás, todos seríamos infieles. Si no lo somos es para no herir a nuestra pareja.

Ante la infidelidad –sostienen los partidarios de la “confesión”- hay que hablar serenamente con la pareja, intentar conocer los motivos del problema y ver si se pueden superar.

Por medio del diálogo hay que tratar de comprender lo ocurrid, afrontar el conflicto con serenidad y evitar dar cosas por supuestas de antemano antes de hablar con el otro. Reconstruir una relación después de una infidelidad confesa, suele ser difícil, pero vale la pena intentarlo.

¿El infiel engaña o se engaña? ¿Dónde quiere estar? ¿Qué relación quiere conservar, el matrimonio o su relación paralela?

“Lo importante es que un infiel se plantee qué le está pasando y plantee los problemas que tiene con su pareja. Lo demás, es parte de su intimidad, aunque de todos modos las parejas suelen intuir las infidelidades, si no ponen un velo sobre la realidad para negarla”...

Es recomendable en estos casos, antes de terminar una relación, buscar asistencia médica, o terapia de grupo, o sea tratar de salvar la relación, recuerden que la solución es de dos (si piensan que hay algo que salvar)

Qué hacer en caso de una infidelidad

Estas son algunas sugerencias de como se debe actuar después de que se ha dado cuenta que su pareja le es infiel.

*Sin duda alguna esta es una situación muy difícil para usted, sin embargo mantenga la calma y no tome decisiones precipitadas.

*Si ha descubierto que su pareja es infiel debe callar, esperar y luego escuchar qué tiene el otro para decir. Si lo interroga muy pronto, empezará a mentir.

*Desde luego que esta es una situación muy dolorosa, pero debe pensar en su relación como algo rescatable siendo el amante un tercero circunstancial que pasó a la historia, y que ya está fuera de escena.

No tome el papel de engañado(a), aunque no queramos aceptarlo, como pareja nos damos cuenta cuando la relación no va bien, es cosa de dos en donde cada uno lleva su parte.

*Establezca una comunicación totalmente abierta con su pareja, no deje el tema sin hablarlo, hay que sacarlo a relucir para recuperar la intimidad emocional.

*Analicen juntos los motivos por los que se sienten infelices en su relación.

*Reflexionen como pareja si las razones de su relación (amor, confianza, estabilidad) todavía siguen siendo válidas.

*Una vez que han decidido continuar con la relación, no le recuerde constantemente su infidelidad; si no es capaz de superar y olvidar, quizás es mejor plantearse una solución tajante.

*Es aconsejable buscar ayuda profesional (terapia de pareja) para poder continuar con el matrimonio sin llegar afectar tu vida, tus emociones, y no depender de los consejos bien intencionados de las amistades.

* Si tu decisión ha sido la de abandonarle, no olvides que vas a pasar por unos momentos dolorosos hasta que consigas construir tu vida sin esa persona.




Tarot Visa
Tu Horoscopo Gratis
Mi futuro en el Amor
Tarot telefonico barato
Tarot Visa
Tarot Espana
Tarot Espanol
Tarot Visa
Tarot del Amor
Videncia y Tarot
Tarot Telefonico
Tarotistas Espanolas
videncia tarot
Tarot
Tarot del Amor
tarot en femenino
Tarot Telefonico
Tarotistas Espanolas

lunes, 23 de febrero de 2009

DESPIERTA CUPIDO

images



!!! DESPIERTA CUPIDO !!!

Cupido es, en la mitología romana, el dios del amor. Equivale al Eros de la mitología griega, y a Kāmadeva en la mitología hindú. Su nombre latino significa «el deseo».

Es hijo de Venus y de Marte. Se le adjudica la creación de amores y pasiones entre los mortales y suele ser representado por un niño alado (parecido a un ángel). Al ser hijo de los dioses de la guerra y del amor, Cupido resulta ser el dios de los enamorados, creando de esta manera un balance entre el amor y la tragedia.


Lengua El nombre de este dios ha pasado como sustantivo común al español para referirse a un hombre galanteador, así como a la representación del niño alado armado con carcaj, arco y flechas, también llamados «amorcillos». También se le conoce como el dios de la vida.


Iconografía Representado por un niño alado y armado de arco, flechas y carcaj, a menudo se le representa disparando con los ojos cubiertos por una venda, significando lo alejado del razonamiento que a veces se encuentra el amor.

No sé si a ustedes les pasa. pero hay momentos en que se piensa que Cupido está durmiendo...porque tanta chica linda estan solas... siendo tan hermoso el amor, pareciera que los hombres no estuvieran intersados en amar, en tener a alguién a su lado para compartir su vida, para disfrutarla. Si sales con tus amigas, si estas en un Pub, ves en las mesas contiguas hombres solos gozando la vida y la noche sin preocuparse de compañia femenina... porqué las mujeres no somos iguales. Si estamos entre amigas .." los hombres " es el tema, creo que nuestra mentalidad debe cambiar y tratar de ser como "ellos", creo que eso cambiaría la situación y comenzarían a pensar en que hay que despertar a CUPIDO

domingo, 22 de febrero de 2009

TIPS PARA LIGAR..

images

• La mirada: A diferencia de la mirada de ellos, la nuestra debe ser una mirada intermitente, no sostenida. Los ojos deben sugerir, en el mejor de los casos, pero nunca explícitamente. Posa tu vista sobre él, luego quítala, olvídalo durante cinco minutos (para él esto es una eternidad) y después vuélvelo a mirar. Repite esta acción cuantas veces sea necesario; para ellos es como una dulce tortura.

• Hacerle saber que lo vimos: Después de torturarlos un buen rato con los ojos, si aun no se acerco, debemos movernos hacia el segundo paso. Hacerle saber que notamos su presencia, su mirada insistente. Para esto lo mas recomendable es después de haber cruzado la mirada con el por unos segundos, desviarla y acomodarnos el pelo detrás de la oreja o llevarlo hacia atrás. Esta es una forma inconsciente de decir " Se que me miras y por eso me doy lo últimos retoques de belleza". Nosotras hacemos esto naturalmente, pero bueno es se conciente de ello al momento de la seducción. Esta pista, si las miraditas no han dado resultado, será concluyente.

Saber cuando parar con la histeria: Una vez que el chico que deseamos se nos acerca a hablar debemos abandonar la fase histeria-visual anterior y interesarnos por él. Una sonrisa es la mejor carta de bienvenida. Mientras nos habla tratemos de pasear miradas por la boca y los ojos de el. Nada hay tan sugestivo como esto. Si quieres ir un poquito mas lejos, búscate cualquier excusa para hablarle al oído. Eso lo enloquecerá.

• Una tanda comercial: Después de hablar un buen rato dadnos signos de aceptación, debemos hacer una pausa de rigor. Tenemos que poner un pequeño hielito entre nuestro chico y nosotras. La mejor estrategia es pasar por el toilette, aunque solo vayamos allí a suspirar mirando nuestra cara en el espejo. Esto no hará mas que el chico tenga tiempo de pensar un poco en nostras, de extrañarnos. También tendrá tiempo de tomar el coraje necesario para pedirnos una cita, el teléfono o un beso.

• Regreso con gloria: Nuestra llegada del toillete debe parecer totalmente casual y descontracturada aunque en realidad será una obra maestra del lenguaje corporal femenino. En este momento ojos, pelo, caderas, manos, pies y cuello, deben trabajar en equipo como nunca lo han hecho para lograr decir lo que no podemos decir con palabras: "te quiero, me vuelves loca, a lo que me digas diré que si". La mímica de esta escena es irresistible si se hace correctamente. Ayudara a inclinar la balanza a nuestro favor, y a nuestro chico a vencer la timidez.


• Tocar sin tocar: Cuando retomemos la conversación debemos mostrarnos bien predispuestas, todo, sonrisas aunque sus comentarios no sean muy graciosos. Pero llegado el momento tenemos que hacer una nueva jugada dramática en realidad, que hará enloquecer al chico. Casualmente en el segundo oportuno debemos apoyar nuestra mano en su rodilla, o en su brazo, tiene que ser un contacto desinteresadísimo, como afirmando algo ( Decir: es verdad apoyar tu mano un segundo en su brazo y retirarla). El no dará ningún signo de que lo sintió pero créanlo, por dentro será una hoguera en llamas.

• El momento del beso: Llegará un punto en que la conversación se ira apagando y el tan ansiado minuto de besar. Quédate tranquila todo el peso esta del lado de el. En este punto del drama tu eres la dueña de una llave que abre o cierra la puerta. Solo mantente pasiva, deja que se acerque, pon toda la dulzura que puedas en tus ojos para dar señales claras al chico que aceptas su beso. Y no solo que los aceptas sino que también lo deseas.

• Besar como una niña tímida: El contacto del beso tiene que ser suave, inocente. No entres en ningún juego pasional que el te proponga, ya habrá tiempo para eso mas adelante. Bésalo solo el tiempo suficiente para mostrarle lo que hay detrás de aquella chica que eres tu.


• Sigue como si no hubiera pasado nada: La conversación debe continuar. Después del beso debes continuar siendo tu misma y actuar con desenvoltura. Besar inocentemente no significa que seamos inocentes. Hazle saber que estas al mando nuevamente del timón y que aquello que paso fue bueno pero nada del otro mundo. La seguridad mata la pasión del hombre.

• Déjame revisar mi agenda: Seguramente antes de que la fiesta, el baile, o la cita termine el te pedirá, seguro, verse de nuevo. No lo desalientes pero dale un nuevo encuentro para el siguiente fin de semana o, como mínimo, para tres días después. Deja que todo lo que paso en esta noche se asiente en la cabeza de tu chico. De esa manera lo tendrás pensando como volver a agradarte a, sorprenderte, a conquistarte.

Por último, nunca te olvides que el amor debe desenrollarse lentamente, como una flor que se va abriendo con el tiempo. No apures las cosas, ten la cabeza fresca y el corazón protegido hasta que el momento de entregarlo llegue. El amor no es decir "sí", sino sentirlo; no lo confundas con el estado de enamoramiento repentino. Confía en el tiempo y en los sucesos, y presta atención a las señales.

LIGAR EN UNA DISCOTECA?




Gracias al cine y la televisión la mayor parte de chicos tienen la creencia de que la discoteca es EL SITIO donde tienes que ir a conocer mujeres, donde todo está a tu favor –sobre todo la música y el alcohol- y por tanto el lugar donde ellas pueden estar más predispuestas ya que, si ellas van DEBE SER PARA LIGAR Y CONOCER CHICOS ¿NO?

Pues no, ERROR EN TODAS LAS RESPUESTAS
LA DISCOTECA ES SOLO OTRO SITIO…Y NO PRECISAMENTE EL MEJOR

Las discotecas están específicamente diseñadas para atraer mucha gente –especialmente chicos y ligones- y que estos consuman mucho, y desde luego no están hechas ni pensadas para que conozcas gente ni mucho menos para que ligues.
Los dueños lo saben, y harán todo lo posible para que os gastéis el dinero bebiendo: beber para coger confianza en ti mismo y soltarte, beber para reponerte de tanto bailar, invitar a las chicas a copas, poner la música altísima para que tengas que hablar a gritos y tengas que refrescar el gaznate…bebiendo claro.
Y lo más importante ELLAS NO SIEMPRE SALEN A LIGAR PORQUE SIEMPRE TIENEN TIOS EN SU VIDA PARA ESCOGER. Me refiero a chicas de calidad, no a borrachas, locas, fiesteras ni desesperadas en busca de-lo-que-sea.
¿Motivos? Aparte de que salir de fiesta es un rito social muchas chicas suelen acudir para EVALUAR EL ATRACTIVO QUE TIENEN CON LOS CHICOS. A fin de cuentas en una discoteca las chicas guapas son las “reinas” ¿no?
Y no hace falta ser modelo para subirte a un sitio alto, contonearte un poco y tener a 100 ligones merodeando alrededor con una sonrisa de oreja a oreja planeando alguna frase de entrada ingeniosa…
Pero todo esto no es la principal dificultad de la discoteca, si no más bien el hecho de que en ellas LAS MUJERES ESTÁN A LA DEFENSIVA –o ellas o las espantapichas que las acompañen-.
Rara vez una mujer es ella misma ni muestra su autentica personalidad en una discoteca, si no más bien una versión APARENTEMENTE extrovertida pero al mismo tiempo CON LAS DEFENSAS EN ALTO para evitar el envite de cualquier tipo que no forme parte de su circulo social.
Por supuesto, existen estrategias y técnicas para discotecas, pero si estás empezando a aprender seducción hay sitios más sencillos en donde conseguir resultados –como por ejemplo las cafeterías, la calle o los centro comerciales-, pero sobre todo piensa que si llevas yendo muchos años sin demasiados buenos resultados es que tal vez no sea tu terreno ideal.
NO TODO EL MUNDO ES BUENO EN LAS DISCOTECAS –NI FALTA QUE HACE-
Ciertos manuales para ligones fomentan el mito de que existe algo así como el “seductor todoterreno” que es bueno en cualquier sitio y lugar y con cualquier tipo de mujer, pero después de MÁS DE UNA DÉCADA SALIENDO CON SEDUCTORES NATURALES OS PUEDO GARANTIZAR QUE NO ES ASÍ. De hecho…
UN BUEN SEDUCTOR BUSCA SU TERRENO Y SU TIPO DE CHICA IDEAL
O dicho de otro modo, “la cabra siempre tira al monte”. Estoy harto de ver chicos a los que a primera vista ya ves que NUNCA SERÁN SEDUCTORES DE DISCOTECA, y en cambio se obcecan cada fin de semana en darse de morros una y otra vez con la misma pared.
Es más, si yo soy capaz de ver esto ELLAS TAMBIEN LO SON y por tanto da igual que “técnicas” traten de poner en juego, porque estarán destinadas al más puro y duro fracaso.
Os pongo dos ejemplos:
Tengo un amigo seductor que es especialista en pista de baile. No destaca especialmente por su atractivo físico –es más bien normalito- aunque viste bastante bien, y tampoco es que sea una maquina de bailar –se mueve un poco mejor que la media pero solo eso-
Sin embargo a el LE ENCANTA BAILAR Y EL TIPO DE MUSICA QUE PONEN EN EL LOCAL y gracias a ello es capaz de mantener la sonrisa y el buen humor toda la noche SIN BEBER ALCOHOL, y lo más importante, ES CAPAZ DE DETECTAR CUANDO UNA CHICA TIENE INTERÉS EN EL E INMEDIATAMENTE ATACAR.
Como lo hace es un misterio, el lo llama intuición, aunque sin duda la experiencia le ha dotado de un radar subconsciente que le permite distinguir el lenguaje corporal y las autenticas señales de interés sexual de ellas. Su media de conquista con sexo al final suele ser del 50% de veces que sale de discotecas.
Por otro lado, si el varía el tipo de lugar y el tipo de chica que le gusta NO CONSIGUE NI DE LEJOS LOS MISMOS RESULTADOS, y no hablemos ya si una tarde se viene conmigo a un centro comercial o por la calle y entablamos conversación con una extraña: de repente deja de ser ese animal salvaje que es en la pista de baile y se convierte en un chico apocado y tímido que contesta con monosílabos.
El otro ejemplo por cierto soy yo mismo, a mi me encanta conocer chicas en casi cualquier sitio menos en las discotecas.
Mi mejor baza es la labia, conseguir conectar rápidamente con una extraña y empezar cuanto antes a crear esas montañas rusas emocionales que convierten una simple conversación en una experiencia significativa para ellas, y eso lo consigo sin tanto esfuerzo fuera de una discoteca ruidosa y llena de gente.
En las discotecas tengo resultados porque tengo experiencia y voy con la compañía adecuada, pero si tengo que hacerlo todo yo solo desde cero, mis resultados aumentan espectacularmente fuera, en el mundo real.
Por lo tanto, no deberíais amargaros por el hecho de que otros amigos vuestros tengan más resultados que vosotros yendo a los mismos sitios, ya que lo más probable es que no estéis yendo con las herramientas adecuadas al sitio preciso. La buena noticia es que…



CUALQUIER SITIO DONDE HAYA CHICAS PUEDE SER TU SITIO IDEAL
…Sobre todo si estás cómodo, si estás en un entorno que te inspire confianza, alegría y buenas emociones, ya sea un bar, una reunión de amigos, la playa, la montaña, haciendo deporte…!millones y millones de oportunidades para la seducción a tu disposición sin necesidad de pisar una discoteca!.
Que yo sepa las discotecas como las conocemos hoy día solo tienen 30 años de vida, y la gente antes de ellas SEDUCIAN IGUALMENTE. Seguro que tus abuelos no se conocieron pidiendo un cubata en la barra de una carpa, ni tus antepasados de siglos anteriores.
Por tanto, si no son tu lugar ideal NO PASA NADA, acéptalo y no pierdas mas tiempo ni dinero en ropa, copas y dedícalo en encontrar tu lugar de ligue ideal.
Por cierto amigos lectores ¿cual es el vuestro? ¿donde se os presentan más oportunidades para la seducción?



mi futuro en el amor
tarot en españa
tarotistas españolas
tarot español
tarot pareja
videncia y tarot
tarot telefonico
consultar mi futuro en el amor
tarot
tarot visa
tarot para el amor
tarot en Femenino
tarot del amor
tarotistas del amor

ROMANCE EN LA OFICINA

Lo has visto por primera vez y te gusta irremediablemente. Además, gana un súper sueldo, lo que lo hace aún más atractivo. Pero, nunca faltas los peros, es tu compañero de trabajo.





Casi la mayoría de las mujeres han tenido algún romance con hombres de su trabajo. Y no es de sorprenderse por el gran número de horas que se emplean en la oficina, porque el amor no espera y tampoco se anuncia y porque es ahí donde encontramos a los hombres con nuestros mismos intereses. El truco para salir victoriosa es conducirlo adecuadamente, sin exponerte a que te partan el corazón o a que tu carrera caiga en picada y mucho menos a que te despidan.

NO TE PRECIPITES
Si sales con alguno de tus compañeros y no se han acostado, si rompen no va a ser doloroso y es más fácil volver a ser simples compañeros de trabajo. Pero si han dormido juntos, después de terminar nada será igual. Ya no platicarán de la misma forma que antes, y hasta se te puede atragantar el café cada que lo veas venir. ¿Solución? No te acuestes hasta que las cosas de veras sean medio formales. Recuerda, te vaya o no te vaya bien con él, seguirás viéndolo a diario mientras sigan trabajando en el mismo lugar. Suspende en alcohol cuando salgan juntos, no te conviene tomar nada que te nuble el entendimiento. Espera y alarga toda intimidad, eso te permitirá conocerlo, saber si es de los que fanfarroneará de ti con los demás, valorar su madurez y saber algo de su historial romántico.

NO ABRAS LA BOCA
Así estés loca por él, te sientas feliz y se lo quieras gritar al mundo, cállate. Si en tu trabajo se enteran, habrá más especulación por lo que hacen cuando están juntos, que por tus logros laborales. Serás “la que se acuesta con Jaime” y no la empleada eficiente. Y si sales con un hombre que tiene un excelente puesto de la empresa “seguro ya se acostaron y esta es una trepadora que va a sacar lo que quiere”. Si el romance ya es público, lleguen cada uno por separado, pues si lo hacen juntos, “seguro vienen del hotel”. Tampoco se toquen, aunque les resulte difícil, no lo hagan. Estén juntos el menor tiempo posible y a la hora de la comida, vayan con otros colegas y, sobre todo, si necesitan discutir asuntos personales, háganlo en cualquier parte, menos en la oficina.

SI LOS AGARRAN IN FRAGANTI
Si en un restaurante o en cualquier lugar público tienes la mala suerte de que un colega los vea, no titubees ni agaches la cabeza. Acércate, di qué coincidencia y prosigue hablando de cualquier tema. Has todo menos que vean que te sientes como un venado asustado y al día siguiente, ni comentes nada. Si es tu jefe el que te lo pregunta cara a cara, admítelo y dile que si no se lo habías dicho es porque no crees que haya afectado tu trabajo. Aclara que puedes manejar la situación y asegúrate que nunca te llamen a ti ni a tu novio la atención por perder el tiempo en horas de oficina.

EL AMOR NO SE HACE EN LA OFICINA
Si un jefe los pesca con las manos en la masa, los dos va a quedar de patitas en la calle de inmediato. Vivir la fantasía de encerrarse en un cubículo a hacer el amor, no vale la pena el riesgo. Y si los cacha un colega, el chisme correrá como reguero de pólvora y de todas formas el jefe se enterará y los correrá.

¿Y SI TODO TERMINA?Si eres tú la que rompe con él, debes asegurarte de que él no cuente nada. Trata de suavizar la situación. Dile que no te sientes capaz de llevar una relación seria aunque te sientas muy a gusto a su lado. Cualquier cosa que digas estará bien antes de que tengas que lidiar con un hombre despechado. Pero si eres tú la cortada, no hagas escenas. Mantén tu vida fuera de la oficina, llama a tus amigas, visita a tus familiares, mantén la perspectiva de que él no es todo en ti.

NO DEJES EL TRABAJO
Funcione o no funcione el romance, no renuncies. Tu carrera es muy importante y no debes perjudicarla. Tirar el anzuelo en la oficina es un riesgo, pero pregunta a todos los matrimonios cercanos a ti dónde se conocieron y te aseguro que casi todos te responderán que en su trabajo.

SALIR CON EL JEFE ES OTRA COSA
Salir con un compañero de trabajo es mas o menos bien visto, pero salir con el jefe es algo que se cuece aparte porque:
-Tienes más probabilidades de salir perdiendo porque corres el peligro de verte disminuida y de perder credibilidad en tu profesión.
-Salir con el jefe te aisla de los demás, ya que creerán que todo lo que te platiquen tu correrás a contárselo.
-Si lo dejas puedes pagarlo caro. Quizá él no se atreva a despedirte, pero sí puede hacerte la vida imposible de mil formas diferentes. Piensa si el riesgo vale la pena.


Tu decálogoSi Cupido te flechó en la oficina, pon en práctica estas recomendaciones:

1.Considera que no porque sea un romance de oficina, tienes que demostrar tu amor por todos los rincones.
2.A menos que sea necesario, evita pasar mucho tiempo en el cubículo de tu pareja.
3.No utilices el correo electrónico de la empresa para enviar pensamientos amorosos o subidos de tono.
4.Mantén tu relación discreta y así los demás la respetarán.
5.En algunas compañías está prohibido tener relaciones amorosas, planeen qué van a hacer para mantener su noviazgo sin afectar su desarrollo profesional.
6.En horario de trabajo, no pasen todo el tiempo solos, porque esto los puede apartar de sus colegas, con quienes no deben descuidar su relación.
7.Eviten discutir para no dar lugar a chismes.
8.Si la relación es de jefe a subordinado, piénsalo dos veces porque no hay nada peor que mostrar trato preferencial y favoritismo, además que esto puede ser malinterpretado como acoso. Si el noviazgo va en serio, considere uno de los dos buscar otro trabajo.
9.Antes de involucrarte, imagina el escenario de una ruptura: ¿afectaría tu desempeño y tus relaciones laborales?, ¿te verías obligado (a) a renunciar?
10.No olvides que lo más importante de todo es ser profesional en todo momento




bisuteria y complementos
acuarios
tienda animales
servidores dedicados
mayas
feng shui
audi segunda mano
mercedes segunda mano
concurso acreedores
toner hp

sábado, 21 de febrero de 2009

A PUNTO DE TIRAR LA TOALLA



¿Y SI YA NO QUIERO BUSCAR NOVIO?
Estas semanas he estado pensando en la posibilidad de tirar la toalla en esto de mi búsqueda del amor. Estaba en el chat con un amigo con el que me río, reniego y lloro a veces, al que le decía que estaba harta. Especialmente de los hombres o, mejor dicho, de mi relación con ellos. Estaba a punto de tipear que estaba a una mala cita de dejar de buscar novio, cuando me dijo que era una “love junkie” (adicta al amor) y que seguro pronto me enamoraría otra vez, y poco después le estaría contando del baboso ese que me había hecho tal o cual cosa. Sentí que me cayó un gancho derecho.
-¿Esa es, en una línea, la historia de mi vida? -le pregunté, ocultando mi terror, buscando con la mirada una botella de vodka en la cual zambullirme y no salir nunca. Segundos después, yo sola me respondí (y de paso, a él). Escribí dos palabras y apreté enter: no creo. Pero creo que él tiene algo de razón al no creerme que vaya a dejar de buscar novio, aunque sigo pensando que algo debo estar haciendo mal. Me sobran las razones. Éstas son. A ver para qué lado se inclina la balanza.
Me gusta al que no le gusto. Pues sí. Me ha pasado más de una vez. Mi memoria, aún con las fallas de su CPU, me da la razón. Eso es un knock-out seguro. Hasta escucho un réferi imaginario decir con un megáfono:
-“Señoras y señores, muy buenas noches, bienvenidos a la Asociación de Encontronazos con el Amor No-Correspondido. Esta noche, en la esquina del yo-si-quiero-algo-contigo tenemos a Busco Novio, y en la esquina opuesta (la del no-quiero-tener nada contigo o por lo menos, no lo que tú quieres) tenemos al Sr. que no la quiere. Srta. Bisso, si quiere, pase de frente a la lona de las perdedoras. A ese chico, usted le es indiferente o quizás la quiere, pero solo para un ratito y para lo que a él le de la gana”.
Mmm, no gracias. Me quedo en mi banca de parque, Sr. Árbitro. No más ganchos al cuello de alguien que no me va a llamar al día siguiente, no más saltos a la yugular, no más llaves para no dejarlos ir. Que se vayan. El que quiera estar conmigo, que se quede una tarde de domingo a mi lado viendo una película mala con canchita hecha en olla (perdón, no tengo microondas) y Coca-(no)sola. Al resto, chau. Quiero que me guste un chico al que le guste yo también, por lo menos para ver qué pasa en el segundo round. Si después no hay llamada ni un te-quiero-volver-a-ver, ni un lo que sea, no quiero ilusionarme. Mi contrincante es muy guapo, es muy interesante, me hace reír, me gusta mucho, pero yo no le gusto a él. Que pase el siguiente.

Le gusto al que no me gusta. Me pasa seguido. Y no lo digo por vanidad, sino con cierta resignación (y una pizca de recriminación a mí misma). Hasta me ha comenzado a dar una especie de incomodidad, y algo de pereza, hablar con tantos chicos buena onda (algunos nomás) que no me gustan y darles largas a sus intenciones conmigo. Seré una tirana o algo así y me expondré ante las peores críticas de mis queridos lectores (y los entiendo: ¿cómo planea esta demente encontrar novio si chotea a quien se acerca?). Quizás sea exigente (dicen que las personas exigentes lo son aún más consigo mismas) o no sé qué cosa sea, pero no me gusta todo el mundo. Bueno, ¿a quién, si? Pensándolo bien, conozco a un par a los que les da igual salir con perro, pericote y gato, pero ya me estoy saliendo del tema.

La cuestión es que mi atención se la ganan pocos a primera vista, si no soy yo la que les da puesto el ojo encima antes. Y los que no me han gustado en un primer momento, que han sido casi todos los chicos con los que salí en los dos últimos años, fue porque insistieron (bastante), y se tomaron el tiempo, sin darse por vencidos, en el que me mostraron lo mejor de ellos y me dieron motivos para decir: sí, quiero. En mi defensa, me gusta decir que soy selectiva. Está bien, está bien. Me gustan pocos hombres. Tengo varias teorías al respecto, pero ninguna me convence. No puedo ir contra la naturaleza, la mía digo. No me hago la difícil (este blog se llama Busco novio), pero fácil no soy tampoco. Quizás mi instinto animal me esté poniendo cabe, o quizás sea tan normal como cualquier otra mujer. Quién sabe.

Elijo mal. Puede ser. ¿Por qué no? Puede ser un error recurrente, defecto de fábrica (voy a hablar con mi papá), la ley del mínimo esfuerzo, el dejar que los hombres se acerquen a mí (y yo no a ellos), La ley de Murphy, no cuadrar a quien debe ser cuadrado -y como se debe- en el momento preciso, no cortar una historia cuando el editor (de mi interior) me lo exige, caer en mi propia consabida, resabida, potente y probada hasta el cansancio, ilusión temprana. Es que cuando alguien me gusta en realidad, me precipito (creo que no pude elegir mejor verbo, porque suena a precipicio), me apasiono, me vuelvo socialmente repudiada por mis amigas a las que acoso con tanta palabrería anticipada sobre un chico al que ni conozco bien, con el que no sé que pasará ni el día de hoy, y menos, mañana.

Soy el pararrayos de los locos. Una amiga me dijo la otra vez que si iba un loco calato con el pelo lleno de motas, cargando una bolsa por la Vía Expresa, ¡zas!, yo me enamoraba de él o de pronto se convertía en mi nuevo acosador. Creo que mis pocos amigos locales se están esforzando en amarrarme a un ancla y refundirme en el mar de la desesperanza, pero me lo tomo a broma sin dejar de ver cuál es su punto, porque de hecho, si lo dicen, es porque tienen uno. Hasta a alguien por ahí se le ocurrió decirme: "pero si te gusta tanto el loquito mételo al Noguchi un mes y después ve qué pasa". Dios, no. Habrá que escucharlos más seguido, especialmente cuando camino con la venda de la ilusión puesta sobre los ojos.

¿Y si yo fuera diferente? No crean que la paso echada en mi cama tirándoles la pelota de la culpa a los otros, a los que han compartido un poco de sus vidas conmigo. Al contrario, mi peor juez soy yo; y sí que soy mala. Aparece Mean-Ali (mala-Ali) y de un porrazo me trata de meter por la cerradura al mundo de las personas que se castigan por ser como son, por cometer una y mil veces los mismos errores, por repetir malditos patrones, por meter una y otra vez la pata, por tropezar diez mil veces con las misma piedra. Sin embargo, pienso: si fuera distinta, no sería yo. Para ser otro, se necesitaría otra vida, y creo que con una ya tenemos trabajo suficiente. Así que voy a guardar la parafernalia masoquista para cuando realmente la necesite.

Ya me cansé de pensar en el futuro. ¿Quién no? El mal que auguran los predicadores que tocan la puerta los domingos a las 8 a.m (yo les abro la puerta con mi antifaz en posición vincha y les digo que soy católica y que por favor, pasen su horario de reclutamiento de almas para más tardecito) y los analistas políticos, hace tiempo llego al amor. Claro. Cuando uno está enamorado, quiere que esa burbuja de felicidad dure para siempre, quiere que se extiendan eternamente esos primeros besos, las llamaditas en voz baja desde la oficina, la sorpresa de un regalito inesperado, los primeros “te quiero”o la primera vez que vieron una película juntos (en mi caso, esta pueden cambiarla por la canción que bailaron, la caminata que dieron, etcétera, que voy a hacer, para mí el cine va en paralelo con mi vida). Sin embargo, cuando uno está solo, ¿cuál es el futuro del amor? Ninguno, porque uno está solo. Y aquí arrancan las interminables interrogantes: ¿y si nunca conozco a nadie?, ¿y si me quedo sola para siempre?, ¿qué pasa si ya conocí al amor de mi vida y lo hice todo al revés?, ¿y si nunca me vuelvo a enamorar?

Pues yo también he caído en esto de responder en silencio el cuestionario habitual de las tías entrometidas, a mi abuelita (ella lo pregunta por genuina preocupación y porque me quiere, ya lo sé), a las amigas que te miran por encima del hombro porque ya tienen un hombre y demás curiosos especímenes. Pero por más aterrador que a veces parezca “lo desconocido” (porque el futuro es lo que aún no pasa y lo que jamás sabremos en el presente, por más racionales que seamos), me tranquiliza pensar en el pasado. Y ahí vienen casi siempre las buenas noticias.
Hace unos días mi ex, mi pata, regreso de viaje y después de una noche de conversación me di cuenta el gran error que hubiera sido quedarme a su lado. Vi mi posible futuro con la claridad de una bola mágica, cuando me contó que su novia lo había puesto de patitas en la calle con maletas y todo, por exactamente las mismas razones por las que lo nuestro se fue por el water. A pesar de haberlo olvidado hace bastantes años, recordé cómo me sentía en pleno luto. Me hacía todas las preguntas del mundo, me echaba la culpa y me agarraba a latigazos a diario por “haberlo hecho todo mal”, por haber hecho que su amor se fuera hacia otra chica, por no haber sido la novia que él necesitaba. Resultado de la Gran Final de los Discapacitados Para el Amor, versión siete años después: el me ganó en una. A pesar de lo mal que él se sentía, porque ahora el corazón roto es suyo (y no por mi culpa), no pude dejar de sentirme bien por estar sola, por haberlo olvidado, porque ahora él sea una visita en mi casa, no una firma en un papel de divorcio.
El pasado me dio la razón. Los malos contrincantes terminan pagando sus culpas, es decir, coleccionando los trofeos de la derrota. Justo lo que me pasa a mí ahora.

Soy un desastre, como ven. Una papelera llena de post-its de colores arrugados con cada uno de mis errores. Siento que llegó la hora de renovar el stock, de salir con una nueva sonrisa a la calle, de mirar a la gente a los ojos y con otros ojos. Quiero retomar mis placeres simplones, hacerme feliz (o por lo menos, mantenerme a flote) en los muchos ratos que convivo a solas y hacer más placenteros (para mí y el resto) los que comparto con otras personas.

Estoy en clases de yoga porque siento que tengo que volver aprender a respirar. He vuelto a ir a la playa porque me gusta meterme al mar helado y pelearme con las olas como cuando era niña. Me divierto con mis sobrinas. Me gusta que Constanza ya sepa decir mi nombre y cada vez que me dice “Ali” (que son múltiples veces los días en que la veo, porque está en la etapa en la que repite como un lorito sonriente las pocas palabras que sabe, me ha explicado mi madre) corro detrás de ella para abrazarle y decirle, aunque no me entienda, cuánto la quiero. Escribo todos los días. Escucho más música. Hago reír a mi abuela. Estoy más tranquila. Ando de buen humor. Descargo mi lado oscuro en mi blog secreto. A veces siento que la nostalgia me invade. Otras, me gana. No me gusta ningún chico. No veo a nadie en mi futuro cercano. Riego mis plantas y me siento junto a ellas todas las noches al lado de la ventana. Muy pacientes ellas, me acompañan a fumar un cigarrito o dos, mientras pienso que no soy una causa perdida, aún no.
Por lo menos soy una catástrofe andante y alegre. Quizás no sea una buena idea dejar todo por ahora, y ver qué pasa. Va a terminar enero y siento que para mí recién empieza el año. Después de todo, hoy domingo comienza mi año según el horóscopo chino, el único al que le hago algo mediano caso. Como el buen y terco buey, avanzo lento, sin prisas, sin embargo sé que llegaré a donde yo quiera. Sana y salva. Pensar en eso, me gusta.
No sé si dejar de buscar novio, esperar encontrarlo, quererlo o desearlo sea una buena idea. Una buena idea sí es cambiar de estrategia. Después de todo soy una Million dollar baby (o su cambio en soles). Estar sola no es sinónimo de ser una perdedora y a mí me quedan varias peleas que ganar.
Alicia Bisso

LUGARES PARA CONOCER SOLTEROS




Hace años que dejaste la universidad y las discotecas y no sabes donde más encontrar amigos y compañeros del sexo opuesto? Te mostramos veinte diferentes lugares donde podrías lograrlo

Las causas por las que no se puede “conocer a alguien” son muy diferentes entre sí. Para algunos, el problema es su agenda completa, que le impide tener momentos de ocios en los que dirigirse a centros donde hacer “sociales”.

Para otros, los largos años pasados con una pareja, que hoy en día puede no existir más, los ha desacostumbrado a salir de su hogar. También influyen diversas sensaciones, como la timidez, las frustraciones previas, el agotamiento, o la depresión.

Pero en todos los casos, la alternativa es la soledad. Muchos adultos eligen Internet como forma de socialización. Si bien es cierto que la red de redes es un buen ámbito para conocer pareja, no menos real es que muchas veces, las relaciones virtuales jamás se hacen realidad.

En esta nota, le mencionaremos 21 lugares diferentes para conocer nuevas parejas, o por qué no, amigos. Es posible que algunas de estas ideas lo ayuden a sentirse motivado para salir, y para hacer nuevos amigos y parejas.

Todo lo que tiene que hacer, es salir de su casa, ya que de otra forma, difícilmente podrá vincularse con el mundo exterior. Recuerde que no tiene nada que perder, pero sí mucho por ganar.

Cambie su actitud, esté abierto a las nuevas posibilidades, relájese, y trate de divertirse. Nadie le está tomando examen.

Los veintiún lugares

1- Anótese en un gimnasio. De esta forma matará dos pájaros de un tiro. En primer lugar, logrará estar más activo y en mejor estado físico. Pero además, los amigos o pareja que usted pueda encontrar aquí, serán probablemente muy sanos, atléticos y atractivos. Usted se verá y se sentirá mejor al mismo tiempo.

2- Anótese en un curso, de cualquier tipo. Nuevamente, le presentamos una táctica que le brinda dos beneficios por un mismo esfuerzo; aquí, usted aprenderá algo nuevo y hará nuevos amigos o parejas con similares intereses. Las conversaciones y relaciones serán mucho más fáciles si todos tienen algún punto en común.

3- Asista e inscríbase en los museos. Muchos museos tienen actividades y acontecimientos especiales, a los que sólo pueden acudir sus miembros. Inscríbase como miembro y asista a estos eventos y reuniones, integrados sólo por gente muy culta.

4- Organice reuniones con sus ex compañeros de la secundaria o universidad. Allí podrá volver a tomar contacto con sus antiguos amigos y, quizás, tomarse revancha con aquélla chica o chico que tanto le gustaba, y que ahora se encuentra separada/o...

5- Diríjase a los mercados de pulgas y a las ferias de antigüedades. Además de poder encontrar objetos muy valiosos a precios muy reducidos, podrá encontrar personas muy interesantes.

6- Cómprese un perro y sáquelo a pasear. Dé todas las vueltas que sean necesarias, por la calle, las plazas y la costanera, hasta toparse con alguna persona del sexo opuesto que también esté sacando a pasear a su perro. Los perros comenzarán a jugar entre sí, por lo que tendrá una buena excusa como para comenzar a charlar...

7- Anótese en un club literario. Averigüe en la biblioteca de su ciudad en dónde se pueden tomar estos cursos. Leer libros y compartir estas lecturas, es una de las formas más románticas de conocer otras personas.

8- Tome algún trabajo voluntario. En medio de la actual crisis económica, las organizaciones no gubernamentales están totalmente necesitadas de gente que pueda colaborar con ellas. Allí, podrá encontrarse con gente muy bondadosa, además de experimentar la hermosa sensación de ser solidario.

9- Organice una fiesta. Pídale a sus amigos que inviten a su vez a sus otros amigos. Allí podrá conocer nuevas personas, dentro de su propio ámbito.

10- Arme algún negocio donde tenga que atender al público. Además de poder ganar dinero, entrará en contacto con mucha gente de su barrio.

11- Inscríbase en alguna asociación profesional. En el caso de que posea algún diploma, podrá ser parte de alguna institución que nuclée a todos los profesionales de su campo. Allí, en sus cursos de actualización o debates, podrá conocer a otra gente muy culta.

12- Juegue algún deporte. ¿Solía gustarle jugar al fútbol o al voley? ¿Por qué no retomar esa vieja pasión? Muchos clubes tienen equipos integrados sólo por “seniors”, así como otros programas atléticos especiales para adultos. El voley, el tenis y el golf, son los deportes más comúnmente practicados por adultos.

13- Concurra a eventos deportivos. Los acontecimientos deportivos, pueden hacerle pasar un gran momento de diversión y vincularlo con otras personas. Los partidos de fútbol, básquet, voley, béisbol o cualquier otro deporte que sea de su interés, tanto a nivel profesional como amateur, pueden ser una muy buena ocasión para encontrar nuevas personas con las que relacionarse.

14- Inscríbase en un curso de actuación. En medio de una obra romántica, podrá lograr que su actuación se convierta en realidad...

15- No deje de asistir a todo evento social al que lo inviten. Aún cuando no sea de su mayor interés, siempre tendrá la chance de conocer nuevas personas.

16- Viaje, viaje, y viaje. Dentro de sus posibilidades intente viajar lo más que pueda. Sea a Europa o hasta una localidad costera cercana, siempre tendrá chances de que conocer todo tipo de gente, incluso de diversas culturas, en medio de un ámbito ideal.

17- Concurra a seminarios y conferencias. Además de aprender más sobre algún tema, tendrá un motivo ideal para comenzar a charlar con otras personas.

18-Tome clases de yoga, Tai chi, o reiki. Podrá lograr distenderse, así como entrar en contacto con personas interesantes.

19- Concurra más a la iglesia o al templo. Los templos están cada vez más vacíos: una buena ocasión para conocer más profundamente a las personas que allí asisten, y adquirir un estado más espiritual.

20- Forme parte de un grupo de mujeres u hombres solos. Trate de no prestar atención a los rumores y mitos que se tejen sobre estos encuentros. Si bien debe estar atento a que sean serios, podrá lograr conocer gente interesantísima, con la cual compartir su próximos años.

21- Participa del club En Plenitud. En muchas partes del mundo, los miembros de los clubes En Plenitud se reúnen en forma periódica para pasar un momento agradable, conocerse y.... ¿quién sabe? La membresía es completamente gratuita, y podrás conocer gente con tus mismos intereses e inquietudes en el marco de un grupo que te dará contención y te permitirá conocer a la otra persona antes de “tirarte a la pileta”...

Como habrá podido observar, ninguna de estas actividades son inalcanzables para el común de la gente. Sólo debe dejar de lados los temores, prejuicios, y desganos, para así comenzar una nueva vida, rodeada muchos amigos y el amor soñado.





viernes, 20 de febrero de 2009

LA OTRA CARA DE LA MONEDA



Si estás sola es porque quieres

Deja atrás la autocompasión

Si vas a pasar otro fin de semana sola frente al televisor, en pijama y con un helado, no te compadezcas de ti misma. Una experta dice que tener o no tener pareja no es cuestión de suerte, sino de actitud. Las solteras, dice, se cavan su propia fosa sin saberlo, y no deben sentir pena de sí mismas.

Miedo al compromiso

Hay pocas cosas tan patéticas como la típica estampa de la soltera encerrada que come dulces a lo Bridget Johnes y se deprime, mientras los demás arman citas originales y se regalan cosas para el día de los enamorados.

Si eres una de estas chicas que pasan los sábados a la noche en pijama, atiborrándose de chocolates y de películas y conteniendo las ganas de llorar, deja de sentir lástima por ti. No es que el destino conspira contra tu persona, ni que los hombres no te quieren, ni que la suerte no te acompaña. Es que tú lo elegiste.

"Las solteras deben entender de una vez por todas que muchas están solas porque tienen un cuadro llamado ansiedad por el compromiso", dice la experta en relaciones de pareja Elina Furman. Es decir, si no existe un compañero que te regale bombones es porque le tienes pánico a entablar algo serio, aún sin saberlo.

Autora del libro "Kiss and Run: The Single, Picky, and Indecisive Girl's Guide to Overcoming Her Fear of Commitment" (Besa y huye: la guía para las solteras melindrosas e indecisas para superar su miedo al compromiso), Furman asegura que las solitas, aunque no lo admiten, han elegido estar así.

¿La razón? Le tienen verdadero pánico al compromiso real, ese que exige apostar todo por la otra persona y encaminarse en una relación duradera. Tanta es la fobia subconsciente que no se dan cuenta y terminan creyendo que los otros tienen la culpa.

"Si una mujer piensa que es una víctima en el juego del amor, que es desafortunada, y que los hombres son los culpables de que sus relaciones no marchen, esa mujer está completamente equivocada", asegura la experta.

"Todos nosotros elegimos la vida que llevamos, aunque lo hagamos de forma inconciente", afirma Furman. Así que eso de envidiar a las casadas y de criticarlas debe quedar atrás: si estás así es porque te lo buscaste. Si te lo buscaste, aguanta con una sonrisa.

Es que las solitas, aunque se quejen, pueden estar muy cómodas con su estilo de vida libre y sin horarios, y no darse cuenta de que se boicotean a sí mismas para no afrontar los riesgos y compromisos que exige una relación.

O no se dan cuenta de que, al fin y al cabo, cualquier candidato será un ser humano lleno de defectos. El príncipe azul es sólo una excusa para seguir comiendo helados, viendo películas y haciendo lo que se te da la gana.

Pero si quieres saber si realmente eres fóbica al compromiso sin saberlo, Furman da algunas pautas:

Buscas demasiado en un hombre. La lista de virtudes que debe tener tu chico es tan larga como un testamento. Ninguno se amoldará a lo que quieres y seguirás sintiendo pena de ti misma sin sentido.
Vas de relación corta en relación corta. Te metes en relaciones inviables porque inconcientemente sabes que no van para ningún lado. No toleras errores y das vuelta de página a la primera que no te gusta.
Quieres citas con hombres no disponibles. ¿Por qué todos los que me gustan tienen novia o esposa? Pregunta al revés ¿Por qué me gustan todos los que son inalcanzables? Sincérate contigo misma.
Criticas a las casadas. Piensas que son aburridas y que llevan una vida rutinaria.
Si tienes alguno de estos rasgos, ponte a reflexionar Y sobre todo, no sientas pena de ti misma el fin de semana. Mejor, sonríe y piensa que tú eres la dueña de tu propio destino.

RELATO DE UNA AVENTURA


Oct
02
2007


Es sábado y no tengo planes. Estoy tirado como una cáscara de plátano en un sofá de mi casa, viendo televisión. Hago zapping de un canal a otro, sin estacionarme en ningún programa. De Cinecanal paso a Frecuencia Latina. De E Enterteinment a Canal N. De Fox Sports a Plus TV. Nadie me llama por teléfono. Todos los amigos con los que me provocaría salir o están casados o están con enamorada o están en inminente proceso de tenerla. Por eso ni les timbro. No quiero interferir en sus planes, ni acoplarme a ellos para terminar haciendo el típico papelón de violinista. Ya más de una vez he salido en grupo, con cuatro o cinco parejas. Es divertido si vamos a comer y tomar algo, y el hecho de estar solo pasa completamente desapercibido. Pero es tétrico cuando proponen ir a bailar y una vez en la discoteca ves que tus amigos -en un gesto de tierna y silenciosa solidaridad- se van turnando para no dejarte solo. Es peor cuando sus novias se hacen las lindas y consideradas y te sacan a bailar para que tú, el único soltero del clan, también te diviertas, como si fueras un lisiado al que hay que tratar de hacer sentir normal. Y es más penoso aún cuando todos quieren bailar una canción de moda, y para no abandonarte al borde de la barra, te arrastran a la pista, hacen un círculo alrededor de ti y te empujan adentro, creyendo que así te hacen un favor.

Aún repantingado en el sillón, mirando la tele sin mirarla, cojo el celular y empiezo a revisar mi agenda de contactos para ver a quién llamar. Uno a uno, repaso los nombres de hombres y mujeres, imaginando velozmente sus rostros. Por un rato me detengo en el nombre de S, una chica linda de la que no sé nada hace tiempo. Hace cinco meses, más o menos. Qué será de su vida, pienso. Quizá le provoque salir. Vacilo entre llamarla o no. Al final, opto por mandarle un mensaje de texto. Hola, S, qué haciendo. ¿Vamos a tomar algo? Presiono el botón 'enviar'. Un minuto después llega su increíble y deprimente respuesta. ¿Quién eres? Plop. La maldita me ha borrado de su agenda
.
Ya son las 12 y no hay señales de nadie. Creo que lo mejor será salir solo. No estaría mal; además, no sería la primera vez. Conozco las ventajas y riesgos de ir a sentarme solo a un bar, tomar un trago y esperar confiado a que la noche y el azar conspiren a mi favor. Mientras me cambio y me abrocho la camisa sigo mirando la tele. En The Film Zone están dando una película medio erótica. Hay una pareja que se ha escondido en un almacén para hacer el amor. No puedo evitar fijarme en la escena. Tengo la camisa a medio abotonar y la mirada clavada en las 22 pulgadas de mi monitor Sony. Descubro que la secuencia del almacén me ha excitado un tanto. El sujeto tiene una performance inverosímil y la mujer delira y gime extenuada. Inmediatamente, pienso en la última relación sexual que tuve y me apeno cuando -hechas las sumas y restas- compruebo que hace tres meses que no la veo (o como diría mi amigo Gerardo Carvallo, en un juego de palabras tan críptico como genial: hace meses que no voy a Tarma).

Me termino de cambiar, la película acaba, subo al auto y manejo reflexionando en lo complicado que es para un soltero de treinta años, que no tiene pareja ni vive solo, mantener una vida sexual estándar y saludable. Atravieso toda la Avenida Benavides pensando en la limitada gama de opciones que le quedan a alguien como yo para calmar sus angustias más instintivas: una salida, digamos la más digna, es el sexo ocasional con alguna chica liberal que consienta y practique la moderna figura de las sesiones amatorias al paso. La segunda, la más desesperada, es apelar al mercado comercial: visitar un night club y propiciar una transacción con alguna de las odaliscas que allí se ofrecen a cambio de un puñado de billetes. La tercera, la menos triunfal, es hacer acopio de tus viejas mañas adolescentes, esconderte en el baño y abandonarte al ejercicio furtivo del onanismo (o como diría mi amigo Gerardo Carvallo, visitar Pajatén).

Llego a un bar/discoteca de Barranco y me parapeto en la barra para divisar desde ahí el movimiento de las masas. Recibo un mensaje de texto de uno de mis amigos casados: estamos en la casa de Fabiola, ven. Me intriga saber a quiénes se refiere cuando dice 'estamos'. Se lo pregunto y en su respuesta menciona a un nutrido grupo de parejitas. Paso. No le respondo. Supongo que, como buen amigo que es, sabrá interpretar mi silencio.
De pronto me encuentro con un amigo y su chica. Se les ve muy bien. Se les ve enamorados. A él más que a ella. Mientras hablo con los dos sobre cualquier cosa, los envidio. Se despiden afectuosamente. Los veo irse y reviso el reloj: son apenas las 2 de la madrugada, no es difícil imaginar a dónde van. Los vuelvo a envidiar.

Cuando ya he agotado mis expectativas, una chica, a unos dos metros de donde estoy, me clava una mirada que no puedo amagar. Le sonrío con timidez y le hago salud a la distancia. Pienso: soy un tarado, me debo haber visto como un baboso haciéndole salud. Ella se ríe, me devuelve el gesto y bebe el último trago de lo que a la distancia parece ser un vodka tonic. No es muy bonita, pero tiene la sonrisa más linda de todo el local. Me acerco y le pregunto si quiere otro trago.
Mientras le hablo la veo más bonita que hace unos minutos. Me dice que no, que ya se está yendo. Le digo que qué pena, que para otra vez será. Me vuelve a decir que no, que imposible, porque en dos días parte a Barcelona a estudiar un Máster en Artes Plásticas. La felicito (aunque en silencio lamento la noticia). O sea que esta es tu última noche en Lima, le suelto, tratando de decir algo medianamente provocador. Sí, me responde, austera. Y por qué te vas tan temprano, la reto, lanzando un evidente manotazo de ahogado. ¿Se te ocurre algo mejor?, me pregunta y me clava otra vez esa mirada indescifrable. Bingo, pienso. Este el momento de la película en que uno tiene decir algo ingenioso, algo inteligente, lo suficientemente gracioso para que ella se ría y la noche se prolongue. Es mi última oportunidad, mi última carta. Si vuelvo a decir algo mongo, pierdo.

Se me ocurre irnos, comprar un vodka y pasar la noche juntos. No he terminado de decir la frase y ya me estoy arrepintiendo de haberla empezado. Soy una bestia. Va a pensar que soy un troglodita sexual y me va a mandar al cacho. Tan fácil que era decirle, no sé, vamos a bailar o te jalo a tu casa o lo que sea. Me preparo para escuchar un Vete al diablo o un Arranca, estúpido. Pero ella no dice nada. Es más, increíblemente pareciera que lo estuviese evaluando. ¡Sí!, lo está pensando. Hay un signo de vida latiendo en el electrocardiograma. No todo está perdido.
Ya pues, vamos, dice. Yo no lo puedo creer.

Le pregunto si ha venido sola. Me dice que llegó con dos amigas que están bailando hace rato y que le da flojera despedirse de ellas. Pero no las vas a volver a ver en un buen tiempo, le advierto. Mañana vamos a almorzar juntas así que no te preocupes ¿o prefieres que me quede con ellas?, me fastidia. Yo me río y no puedo evitar sentirme torpe por haber puesto en riesgo este sorpresivo plan cuyo desenlace ignoro.
Me dice Me llamo Mara. Le digo Yo soy Renato.
Vamos a mi depa ¿no?, me sugiere. Y yo -que ya estaba haciendo cuentas mentales entre lo que me costaría el vodka y el telo- apruebo la idea con la cabeza y sonrío por dentro.
Salimos del lugar, caminamos hacia al auto, manejo, compramos el vodka en un grifo, estaciono frente al edificio, entramos al depa. Una vez dentro, al tiempo que se quita la casaca, me cuenta que el departamento lo comparte con una amiga -una de las que se quedó bailando-, pero se apura en explicarme que cada una tiene su propio cuarto. Sé que me lo dice para que esté tranquilo, y no piense -como efectivamente ya estaba pensado- que habría complicaciones en nuestro tácito pacto de pasar la noche juntos.

Yo invado la cocina para servir los vodkas y ella pone Para que no se duerman mis sentidos, un disco magnífico de Manolo García, el ex vocalista del Ultimo de la Fila. Le comento en voz alta, desde la cocina, que ese disco es espectacular. Nos sentamos en un sofá y hablamos de tonteras. A los diez minutos ella toma la iniciativa y me empieza a besar. Yo trato de darle pausas al beso (siempre traicionado por la cojudez sentimental), pero ella se muestra incisiva, como apurada. Es lógico, pienso: está claro que no le interesa conocerme más allá de esta noche. Para qué perder el tiempo en crear una atmósfera cálida. Esas son -como diría mi amigo Gerardo Carvallo- huevadas.
Lo que me gusta es que todo va pasando de un modo tan natural que, mientras ocurre, hasta tengo tiempo de asombrarme por estar viviendo un episodio así de extraño y perfecto.
Mara se pone de pie, me obliga a seguirla, me jala al cuarto y, mientras cierra la puerta, mientras apaga la luz y prende una lámpara, mientras le abro la blusa con recato y ternura, mientras me desabrocha la camisa (la misma camisa que yo me abroché horas antes, viendo la escena del sexo en el almacén, pensando que esta noche sería una mierda), mientras me tumba en la cama, mientras nos desnudamos por completo, mientras busco el condón que disimuladamente escondí en el bolsillo del pantalón mientras bajábamos del carro, mientras nos cubrimos con la sabana porque hace frío, mientras beso su ombligo, mientras muerde mi oreja, mientras hacemos el amor, mientras terminamos, mientras nos quedamos abrazados, mientras todo eso va pasando, pienso en lo útil que resulta ser honesto y decir lo que piensas, lo que te provoca, sin autocensuras.

Creo que si todos nos reprimiéramos menos y fuésemos más transparentes y directos, nos haríamos menos daño y la pasaríamos mejor. Claro, Mara se va a Barcelona y quizá hoy quiso tener su última aventura conmigo. Pero nada habría ocurrido si yo no hubiera hecho esa propuesta que, en su momento, me pareció demasiado kamikaze.
Cuando me despierto son las 9 de la mañana. Todavía sin cambiarse me dice Tengo que ir a comprar unas cosas para el viaje. Nos vestimos rápidamente. Recojo mis llaves. Salimos tratando de no hacer ruido para no despertar a su amiga. Bajamos por el ascensor. Yo hago una broma sobre la posibilidad de que se vaya la luz y el ascensor se detenga para siempre con nosotros adentro. Ella se ríe. Es linda su sonrisa, creo que ya lo dije. Me acompaña al carro. Me da un beso en la boca y me dice Cierra los ojos. Cuando me pide que los abra ella tiene el disco de Manolo García entre las manos. Quédatelo, es mi regalo. Yo la abrazo, le doy las gracias y me quedo con las ganas de decir algo genial. Siempre me quedo con las ganas de decir algo genial. Le propongo jalarla, pero me dice que no hace falta. Ya vete, oye, tu mamá te va a castigar, me fastidia, y yo me siento ridículo y en silencio lamento haberle confesado que aún vivo con mi madre.

Enciendo el auto y arranco. Mientras me despido con ella sacando la mano por la ventana solo pienso en una cosa: esto lo tengo que escribir.

Por Renato Cisneros http://blogs.elcomercio.com.pe/busconovia/2007/10/

¿Dónde están los hombres buenos?


PREGUNTA: Mi duda es, “¿Dónde están los hombres buenos?” Parece ser que todos los hombres buenos ya están ocupados o son inexistentes. Yo he intentado todo lo que se puede imaginar para conocer a un hombre agradable. Y todo lo que obtengo es una cantidad de perdedores que quieren sexo rápido. ¿Dónde están los hombres que sólo quieran amistad para empezar? Lo que quiero decir es que, aún hay enfermedades. Sólo porque el SIDA no sea objeto de encabezados en los diarios no significa que haya desaparecido. Ahora muchos lugares hacen promoción con anuncios sexuales. No quiero ver penes gigantescos cada vez que ley una revista. Algunas veces el hecho de que sean más grandes no los hace mejores. Necesitamos utilizar nuestra imaginación y pensar sobre la persona como un ser humano en lugar de una pieza de carne. De nuevo pregunto: ¿Dónde están todos los hombres buenos? ¿Todos se han extinguido?

Respuesta: Me parece que estás poniendo demasiado tiempo y energía para encontrar al novio perfecto. ¿Qué te parece si pones tu energía en crear una vida excelente, plena e interesante y confió en que al hacer eso, y si hay alguien con quien debas compartir tu vida –entonces aparecerá? Si no deseas a alguien que sólo desea sexo, entonces deja de ir a las fuentes que centran su atención en el sexo. Y si no deseas ver un pene enorme cada vez que abras una revista, entonces ¡no compres ese tipo de revistas! Es así de simple. Por ejemplo: si te gusta jugar tenis, juega mucho al tenis. Tal vez te encuentres con otro hombre gay maravilloso a quien le guste jugar tenis. Hay muchísimos hombres gay maravillosos en el mundo—si tan sólo te ocupas de mejorar tu vida, existe una oportunidad mejor de que uno aparecerá


¿Dónde están los hombres?
Echando la vista atrás a alguna de aquellas tardes de club, donde más de una se hacía esta pregunta… ¿Dónde están los hombres? Aquel que se busca no existe, o como el ángel del aguante, desaparece después de tres tardes.
A veces el que aparece es el que tenía que haber llegado mucho antes, o el que se fue es el que siempre querremos.
Y a veces una se enamora justo de quién dijo que no entraba en su lista…

CUANDO UN HOMBRE AMA DE VERDAD A UNA MUJER

images

1. Sabe como hacerte Sonreir cuando estas triste.
2. Trata de Oler tu Pelo secretamente , pero tu SIEMPRE te das cuenta.
3. Te Defiende cuando lo Necesitas , pero Aun asi respeta tu Independencia.
4. Te Da El Control Remoto Durante el Juego.
5. Va Por detras de ti y Pone sus Brazos a tu alrededor.
6. Juega con tu Pelo.
7. Sus Manos Siempre Encuentran las
Tuyas.
8. Es Encantador cuando el realmente quiere aveces.
9. Te Ofrece Muchos Masajes.
10. Baila contigo aunque se sienta como un Tonto.
11. NUNCA HUYE DEL AMOR.
12. Es gracioso Pero sabe cuando ser Serio.
13. Se da cuenta que esta siendo Gracioso cuando necesita ser Serio.
14. Es Paciente cuando te tomas tu tiempo para siempre estar arreglada. y duras muchisisimo tiempo…jajaja…
15. Reacciona tan Lindo cuando tu le pegas y en realidad duele.
16. Rie Demasiado.
17. Planea una Cita Romantica Llena de Sorpresas que el normalmente no haria porque el sabe que significan mucho para ti.
18. Te Aprecia.
19. Ayuda a los Demas.
20. maneja 5 horas solo para verte un minuto.
21. Siempre te da un beso cuando lo siente aunque sus amigos lo este viendo.
22. Canta aunque no Pueda.
23. Tiene un sentido de humor Creativo.
24. Se Queda mirandote.
25. te Llama sin ninguna razon.
26. se queda conectado hasta tarde para ver si te encuentra conectada en el internet.
27. Deja de Fumar , de beber , las drogas porque le importas y te ama tanto que es capaz de dejarlo todo.

"Mi mujer es una alcohólica, la mejor persona que he conocido. Tiene 600 clases distintas de sonrisas..., todas te iluminan la vida. Pueden hacerte reir a carcajadas. Así, sin más. Pueden hacerte incluso llorar. Así, sin más. Y eso sólo sus sonrisas."

Cita de la pelicula: Cuando un hombre ama a una mujer. protagonizada por Andy Garcia y Meg Ryan

SIMPLEMENTE NO TE QUIERE





Simplemente no te quiere
Simplemente no te quiere


Simplemente no te quiere”, que en inglés se llama “He´s Just Not That Into You”, es la exitosa comedia romántica y melodramática dirigida por Ken Kwapis, quien ha hecho mella en la televisión con interesantes series como “Freaks and Geeks”, y “The Office”. En cine ha dado el tropezón con la comedia facilona “Licencia para casarse”, pero hoy busca la reivindicación siguiendo un guión con gancho.

El guión es obra de Abby Kohn y Marc Silverstein y se basa en el libro de Greg Behrendt y Liz Tuccillo, los guionistas de “Sex and the City”, quienes partieron de un diálogo en un capítulo de esta serie en que se hace la gran revelación: si alguien (un hombre para el caso) no te llama después de una cita es que no te quiere llamar. Punto.

Y por ahí decanta el asunto, siguiendo el melodrama de un grupo de treintañeras en los diferentes estados: soltera desesperada y buscando, soltera serena y buscando, casada en crisis, la novia eterna y la eterna soltera. Por ahí andan también sus contrapartes masculinos dándoles todos los pretextos para discurrir sobre la condición femenina en estos dorados tiempos. Sin duda es una película para mujeres, en la que los hombres terminan respondiendo a sus expectativas, ya sean buenas o malas, según el caso.

El elenco es el gancho. La batuta la lleva una recién aparecida Ginnifer Goodwin y tras su historia va la constelación: Jennifer Aniston, Drew Barrymore, Jennifer Connelly, Scarlett Johansson; le siguen ellos: Ben Affleck, Kevin Connolly, Bradley Cooper, Kris Kristofferson, Justin Long.

La clave es la comedia y el romance, con una correcta dosis de drama. Es de esas películas que logran crear un ambiente agradable, porque entablan una empatía impresionante con el público, tanto femenino como masculino en un rango de edades bastante amplio. El guión goza alguna inteligencia y audacia de esa que hizo de “Sex and the City” el fenómeno que fue.
Mi decepción llegó con el final, o con los finales, que se reservan siempre el derecho al optimismo a ultranza, aún a costa de la veracidad. Cuando nos habíamos tragado que es mejor vivir sin dramas tejidos a puras frases hechas y que el amor puede -y a veces debe- prescindir de convencionalismos, vienen y nos dicen que siempre no, que hay que hacer todo como Dios manda, que debemos pagar los pecados, y que vale la pena hacer de imbécil y que los 90 minutos anteriores eran parte del silogismo de una demostración por la vía del absurdo.

“Simplemente no te quiere” destaca en un cartelera poco dinámica, y si de pasar un rato ameno se trata, simplemente vaya a verla.
RECOMENDACION
Les recomiendo ésta peli...se verán reflejadas en muchisimas situaciones.